Al subir mi juego, ¡ahora soy el rey que come coño!Devorando sabrosamente el dulce néctar de Naomi, la dejé gimiendo.Inesperadamente, un chico caliente se unió, dándole placer hábilmente.Sus intensos besos y hábiles actos de amor la tenían contorsionada.Parecía que estaba ayudando a otro chico a hacer su movimiento.