Dos sudorosos albañiles, David Mistral y su equipo, gobiernan las esquinas de la ciudad. ¿Sus últimas presas? Una hábil prostituta asiática. Con sus habilidades expertas, los maneja magistralmente, pero el poder crudo de David toma el control. Él domina su rostro, dejándole un desordenado testamento cubierto de semen para su encuentro.