La chica alemana Anja, amante de los juguetes sexuales, usa una máquina para darse placer a sí misma. Maneja hábilmente el juguete, su coño apretado y sus grandes tetas naturales, creando un espectáculo erótico. Esta belleza europea se da placer masturbándose con un pepino, dejando a los espectadores deseando más.